Ejemplos de marketing olfativo
Los olores a pan recién hecho, café, chocolate caliente y otros aromas estimulantes aumentan las ventas. ¿Cómo funciona la industria del marketing olfativo?
Envidio el ingenio de los especialistas en marketing. Está claro que en condiciones de competencia global total tienen que salir, ¡pero qué bien salen!
Al principio apelaron a nuestra codicia, proponiendo cada vez más rebajas: todos estos Black Fridays, Cyber Monday y bacanales de compras de Año Nuevo y Navidad. Y luego la navidades se meten en nuestros hogares. San Valentín, seguido del 23 de febrero y el 8 de marzo, y las rebajas de primavera, verano y otoño están a la vuelta de la esquina.
Pero los vendedores y fabricantes astutos descubrieron que, a pesar de las compras constantes, no todos los compradores potenciales han dado la vuelta al mundo. Y luego decidieron sacar lo último de su dinero utilizando un truco verdaderamente vil: los olores artificiales.
Tabla de Contenidos
El olor a pan recién hecho y chocolate caliente. Cómo nos vemos obligados a comprar
Vas caminando por la calle y de repente sientes el impresionante y único aroma del pan recién horneado. Es posible que esto te haya sucedido más de una vez.
A pocos metros de ti hay una panadería y tienes tantas ganas de entrar que es imposible resistirse.
Al mismo tiempo, lo más probable es que no te hayas dado cuenta de que el olor a horneado que te hace cosquillas en la nariz no es real.
Mercado de tus sentimientos
Esta práctica se llama marketing olfativo y la demanda de este servicio ha aumentado significativamente durante la última década.
Algunas empresas que trabajan en esta área crean aromas que les permiten vender varios productos de manera más efectiva, mientras que otras tienen la tarea de vincular un aroma creado especialmente con una marca específica.
En 2006, los productores de lácteos estadounidenses publicaron una serie de carteles que olían a galletas recién horneadas, con las que a menudo se bebe leche.
Las investigaciones muestran que los compradores atraídos por una tienda por su aroma favorito suelen gastar un 20% más allí.
1. Cuando el plástico huele a cuero
Los fabricantes de artículos de cuero artificial utilizan ampliamente el aroma del cuero natural para su ropa o muebles.
Huele a cuero pero no es cuero.
Incluso si la etiqueta del producto indica su composición, el olor del cuero auténtico puede ayudar a conquistar el corazón del comprador (aunque el precio del producto también influye: el cuero artificial, por supuesto, es más barato).
2. El espíritu de la Navidad
Todos los árboles de Año Nuevo, ya sean artificiales o naturales, están impregnados de aromas artificiales.
Lo mismo se hace en las tiendas en vísperas de las fiestas de Navidad y Año Nuevo.
Cada país tiene sus propios olores asociados con la Navidad y el Año Nuevo, se utilizan para crear un ambiente festivo.
3. Las palomitas de maíz hacen redes
Estamos acostumbrados al olor a palomitas de maíz en el cine, pero algunas tiendas también utilizan su olor artificial para atraer clientes.
El olor a palomitas de maíz a menudo incita a los espectadores a comprar no sólo esas mismas palomitas de maíz, sino también algo más antes del comienzo del espectáculo.
4. ¿Un poco de café con tu gasolina?
Muchas gasolineras tienen ahora tiendas que utilizan un olor artificial a café para atraer clientes.
El café en una gasolinera es algo habitual
A la gente de todo el mundo le encanta el café: cada día se beben más de 2 mil millones de tazas de esta bebida en nuestro planeta.
La práctica muestra: si la gente huele café, lo comprará, y si huele café en una gasolinera, una persona no solo comprará una taza de café, sino que también repostará gasolina.
5. Aromas dulces de las confiterías.
Las confiterías, por regla general, no preparan dulces detrás del mostrador, pero siempre huelen a chocolate. ¿Por qué?
Aquí están: dulces tentaciones.
El uso de aromas artificiales en las confiterías también forma parte de la estrategia para atraer visitantes, especialmente niños. Después de admirar el chocolate y disfrutar de su olor, la gente compra más.
6. ¿Tu pan está fresco?
Un ejemplo clásico de marketing olfativo es el olor a pan recién horneado.
Este olor no sólo despierta el apetito, sino que también atrae los sentidos de la persona y evoca alegres recuerdos de la infancia.
7. Fragancias para levantar el ánimo
Este tipo de olor lo utilizan los fabricantes y vendedores de ropa.
Los olores de las flores y el frescor cautivan a los clientes.
Las tiendas de trajes de baño suelen utilizar aromas de mango y coco para crear un ambiente navideño para los compradores. Y en las tiendas de lencería no son infrecuentes los aromas a rosas y narcisos.
¿A qué huele tu marca?
Algunas empresas desarrollan aromas especiales para sus marcas. Este olor se convierte en su firma y parte de su imagen, junto con su marca registrada y eslogan.
«A la hora de elegir un producto, el olfato no es menos importante que la visión, ayuda a evaluar la atmósfera y a tomar una decisión», comparte Olivia Jezler de The Future of Smell, una empresa que ofrece servicios de marketing olfativo.
«El olfato es el único sentido que puede conectar directamente nuestras emociones con los recuerdos», dice.
El marketing olfativo no se trata sólo de vender productos y alimentos.