¿Cuál es la diferencia entre la sal marina y la sal de mesa?
Podemos ver diferentes nombres en los paquetes de sal: sal de mesa, sal del Himalaya, sal marina, sal celta, etc. Si bien la mayoría de las especies difieren en color, los peces de mar y de mesa tienen casi el mismo aspecto. ¿Existen diferencias significativas entre ellos, por ejemplo en sabor o composición?
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¿Qué es la sal de mesa y de dónde viene?
La sal de mesa (o sal de mesa) es un producto alimenticio natural de color transparente en forma de pequeños cristales, al igual que el cloruro de sodio, NaCl. La base de sal contiene dos componentes: sodio (39,4%) y cloruro (60%). Todo lo demás es una pequeña cantidad de impurezas.
La sal de mesa se extrae de varias formas y, en función de ésta, tiene el nombre correspondiente:
- Evaporación: evaporando la sal de las soluciones. Pueden ser salmueras subterráneas naturales o soluciones obtenidas bombeando depósitos de sal gema con agua.
- Piedra: obtenida mediante el desarrollo de minas. Este producto no se trata con agua ni calor.
- Autoplantado: obtenido del fondo del lago.
- La sal marina (sal marina) se obtiene por evaporación natural del agua de mar.
Por tanto, todos los tipos de sal especificados, incluida la sal marina, pueden denominarse sal de mesa. Estrictamente hablando, se trata de cualquier cloruro de sodio que haya sido sometido a un procesamiento adecuado y sea apto para el consumo humano. Al mismo tiempo, no toda la sal marina se puede llamar sal de mesa, por lo que conviene estudiar detenidamente el embalaje.
Dato interesante: en 2018, se realizaron cambios en GOST, que regulaba el estándar de calidad de la sal. Desde su entrada en vigor, el nombre «sal de mesa» ha desaparecido de los paquetes; ahora el producto se llama sal de mesa. El nombre anterior distorsionaba la realidad, pues no toda la sal utilizada en los alimentos pasaba por el proceso de cocción.
Diferencias entre la sal marina
De hecho, la sal marina casi no se diferencia de la sal de mesa. Lo único es que la composición es un poco diferente. La sal marina también se compone principalmente de cloruro de sodio: contiene un 55% de cloruro y un 30,6% de sodio.
Sin embargo, además de esto, hay un 7,7% de sulfatos, un 3,7% de magnesio, un 1,2% de calcio, un 1,1% de potasio y un 0,7% de otros componentes. Resulta que la sal marina también está enriquecida con minerales útiles.
Este factor fue la razón por la cual la sal obtenida del agua de mar comenzó a ganar popularidad debido a su utilidad en comparación con la sal de mesa normal. También existe el mito de que puedes añadir menos sal marina a tus platos, por lo que es más saludable. De hecho, los cristales son de mayor tamaño, pero el contenido de cloruro de sodio es idéntico.
Sin embargo, los expertos afirman que tras varias etapas de purificación y procesamiento, el producto pierde una proporción importante de minerales. Para obtener su dosis diaria, es necesario consumir una gran cantidad de sal, y esto ya no tiene ningún beneficio para la salud.
La sal marina natural también contiene yodo en pequeñas cantidades: alrededor de 0,7 mg/kg. Pero hay un producto aparte: la sal de mesa yodada, en la que la cantidad de yodo es mucho mayor (alrededor de 40 mg/kg).
La sal marina blanca no tiene un sabor específico. Por cierto, cuanto más claro sea su tono, más intensa será la limpieza del producto. Varias impurezas afectan el color de la sal marina. Puede ser gris, rosa, negro, etc.