Australia está luchando contra una invasión de peligrosas hormigas rojas de fuego
Las especies invasoras son una amenaza creciente para los ecosistemas de todo el mundo, y Australia no es una excepción: el país se enfrenta a una infestación de hormigas rojas de fuego (RIFA), que representan una grave amenaza tanto para la agricultura como para los residentes.
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¿Cuál es el peligro?
Los RIFA se introdujeron en el continente a finales del siglo pasado y desde entonces se han extendido por varios estados, causando daños importantes a la vida silvestre y a las economías.
El peligro de los RIFA reside no sólo en su capacidad de matar a otras especies, sino también en sus dolorosas picaduras: su veneno puede provocar un dolor intenso y las personas con alergias pueden sufrir un shock anafiláctico.
Controlar las especies invasoras no es una tarea fácil y Australia está lejos de ser el único país que enfrenta este desafío. Las especies invasoras causan estragos en los ecosistemas y las economías de todo el mundo cada año, y es probable que su impacto aumente a medida que aumentan el comercio y los viajes.
Financiar e ignorar soluciones innovadoras
Para combatir las hormigas rojas de fuego en Australia se ha desarrollado un programa gubernamental para el que ya se han asignado más de 1.200 millones de dólares.
Sin embargo, parte de esta cantidad aún no se ha destinado a investigación y soluciones innovadoras.
En una audiencia pública en el Senado australiano en marzo de 2024, la Organización de Investigación y Ciencia del Gobierno de Australia (CSIRO) argumentó que la financiación era insuficiente. A su vez, los agricultores expresaron su preocupación porque el programa no tomó en cuenta sus actividades.
Los agricultores desempeñan un papel fundamental en la lucha contra la RIFA, ya que sus tierras son las principales zonas susceptibles a la infestación. Su conocimiento y experiencia son esenciales para desarrollar una estrategia eficaz para combatir las especies invasoras.
No considerar las necesidades de los agricultores e ignorar las soluciones innovadoras ha debilitado el programa nacional de erradicación de RIFA. Se necesitan fondos adicionales y una colaboración más estrecha con agricultores e investigadores para garantizar el éxito del programa.
Previsión de la situación
Los expertos dicen que las consecuencias de la propagación de RIFA podrían ser mucho peores, ya que el 95% del continente es apto para su habitación. Dado que se espera que alrededor de medio millón de australianos sean picados por hormigas cada año, los expertos ya han respaldado el uso de productos químicos para combatir estos peligrosos insectos.
